sábado, 4 de junio de 2016

DIOS QUIERE QUE USTED SEPA ,QUE HABRÁ UN JUICIO DE CONDENACION PARA LOS QUE NO CREEN EN CRISTO.
ROMANOS 3-23-3:23 por cuanto todos pecaron, y están destituidos de la gloria de Dios,

APOCALIPSIS 21-8-21:8 Pero los cobardes e incrédulos, los abominables y homicidas, los fornicarios y hechiceros, los idólatras y todos los mentirosos tendrán su parte en el lago que arde con fuego y azufre, que es la muerte segunda.

ROMANOS 6-23-6:23 Porque la paga del pecado es muerte, mas la dádiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús Señor nuestro.

PRIMERA DE CORINTIOS 6-9 Y 10-6:9 ¿No sabéis que los injustos no heredarán el reino de Dios? No erréis; ni los fornicarios, ni los idólatras, ni los adúlteros, ni los afeminados, ni los que se echan con varones,
6:10 ni los ladrones, ni los avaros, ni los borrachos, ni los maldicientes, ni los estafadores, heredarán el reino de Dios.

viernes, 3 de junio de 2016

¿Por qué el ser una buena persona no es suficiente para entrar al cielo?




 
Pregunta: "¿Por qué el ser una buena persona no es suficiente para entrar al cielo?"

Respuesta:
Si usted le pregunta a la mayoría de las personas qué tienen que hacer para llegar al cielo (suponiendo que creen en el cielo o en algo después de la muerte), la sorprendente respuesta será algo parecido a "siendo una buena persona". La mayoría, si no todas las religiones y filosofías del mundo, están basadas en la ética. Ya sea el islam, el judaísmo o el humanismo laico, la enseñanza común dice que para llegar al cielo es un asunto de ser una buena persona, siguiendo los diez mandamientos o los preceptos del corán o la regla de oro. Pero, ¿es esto lo que el Cristianismo enseña? ¿Es el Cristianismo una de las tantas religiones del mundo que enseña que para llegar al cielo hay que ser una buena persona? Veamos lo que dice Mateo 19:16-26 para obtener algunas respuestas; es la historia del joven rico.

Lo primero que notamos en esta historia es que el joven rico está haciendo la pregunta correcta: "¿qué bien haré para tener la vida eterna?". Haciendo esa pregunta, él reconoce el hecho de que a pesar de todos sus esfuerzos realizados hasta el momento, hay algo que falta, y quiere saber qué más debe hacer para obtener la vida eterna. Sin embargo, a pesar de que él está haciendo la pregunta correcta, él la está haciendo desde una cosmovisión equivocada, la del mérito ("Qué bien haré..."); él no ha logrado entender el verdadero significado de la ley, como Jesús le indicó, que consistía en que la ley fuera nuestro ayo para llevarnos a Cristo, (Gálatas 3:24).

Lo segundo que hay que destacar es la respuesta de Jesús. Jesús a Su vez hace una pregunta: ¿Por qué me llamas bueno? En otras palabras, Jesús está tratando de llegar al meollo del asunto, es decir, que nadie es bueno y nadie hace lo bueno, excepto Dios. Como se señaló anteriormente, el joven rico estaba operando bajo una falsa premisa: que el hombre es capaz de hacer lo que es bueno y ganar su entrada al cielo. Jesús queriendo aclarar Su punto de vista, le dice al joven rico que si quiere tener la vida eterna, debe guardar los mandamientos. Al decir esto, Jesús no está promoviendo una justicia basada en las obras. Más bien, está desafiando las suposiciones del joven rico, mostrándole la comprensión tan superficial que él tenía de la ley y de la capacidad humana.

La respuesta del joven es muy reveladora. Cuando se le dijo que guardara los mandamientos, él le pregunta a Jesús: "¿cuáles?", y Jesús amablemente continua mostrándole al joven rico el error de su proceder, dándole el segundo mandamiento de la ley, es decir, los mandamientos que tratan de nuestras relaciones con otras personas. Se puede percibir la frustración en la respuesta del joven rico cuando le dice a Jesús que él los ha guardado todos desde su juventud. Hay dos cosas para destacar: en primer lugar, la ironía en la respuesta del joven rico. Al decir que él ha guardado todos estos mandamientos desde su juventud, ha roto el mandamiento sobre el falso testimonio. Si realmente hubiera sido honesto, habría dicho que por más que lo intentara, no había podido guardar los mandamientos en su diario vivir. Él tiene una comprensión muy superficial de la ley y una muy presumida opinión de su propia capacidad humana. En segundo lugar, él todavía sabe que no es suficientemente bueno; él le pregunta a Jesús: "¿Qué más me falta?".

Ahora Jesús confronta la propia justicia del joven rico. Le dice que, si desea ser perfecto (es decir, completo), debe vender todo lo que tiene y seguir a Jesús. Jesús ha identificado perfectamente la "carencia" de éste joven, la cual es su apego a la riqueza. Su gran riqueza se ha convertido en un ídolo en su vida. ¡Afirmó haber guardado todos los mandamientos, pero en realidad ni siquiera había podido guardar el primero, de no tener otros dioses aparte del Señor! El joven rico le dio la espalda a Jesús y se alejó. Su dios era su riqueza, la cual escogió por encima de Jesús.

Jesús ahora se dirige a sus discípulos para enseñarles un principio: "Otra vez os digo, que es más fácil pasar un camello por el ojo de una aguja, que entrar un rico en el reino de Dios". Esto fue impactante para los discípulos, quienes tenían la idea de que las riquezas eran una señal de la bendición de Dios. Pero Jesús señala que las riquezas son un obstáculo que tienden a alimentar la autosuficiencia. Sus discípulos preguntan: "¿Quién, pues, podrá ser salvo?". Jesús responde recordándoles que la salvación es de Dios: "Para los hombres esto es imposible; mas para Dios todo es posible".

¿Quién, pues, podrá ser salvo? Si se le deja solo al hombre, ¡nadie podrá ser salvo! ¿Por qué el ser una buena persona no es suficiente para llegar al cielo? Porque nadie es "bueno"; sólo hay uno que es bueno y es Dios mismo. La Biblia dice que todos pecaron, y están destituidos de la gloria de Dios (Romanos 3:23). La Biblia también dice que la paga de nuestro pecado es la muerte (Romanos 6:23a). Afortunadamente, Dios no esperó hasta que de alguna manera aprendiéramos a ser "buenos"; "siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros" (Romanos 5:8).

La salvación no se basa en nuestra bondad, sino en la bondad de Jesús. Si confesamos con nuestra boca que Jesús es el Señor, y creemos en nuestro corazón que Dios le levantó de los muertos, seremos salvos (Romanos 10:9). Esta salvación en Cristo es un don precioso, y como todos los dones verdaderos, no se pueden ganar (Romanos 6:23b; Efesios 2:8-9). El mensaje del evangelio es que nunca podemos ser lo suficientemente buenos para llegar al cielo. Debemos reconocer que los que estamos destituidos de la gloria de Dios, somos pecadores y debemos obedecer el mandamiento de arrepentirnos de nuestros pecados y poner nuestra fe y confianza en Jesucristo. Solo Cristo fue suficientemente bueno para ganar el cielo, y Él da Su justicia a aquellos que creen en Su nombre (Romanos 1:17).

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¿Por qué el ser una buena persona no es suficiente para entrar al cielo?



jueves, 2 de junio de 2016

¿Cuáles son las diversas teorías de la expiación?




 
Pregunta: "¿Cuáles son las diversas teorías de la expiación?"

Respuesta:
A través de la historia de la Iglesia, varios diferentes puntos de vista o teorías de la expiación, algunos verdaderos y algunos falsos, han sido propuestos en diferentes tiempos por diferentes individuos o denominaciones. Una de las razones por esto es que tanto el Antiguo como el Nuevo Testamento revelan muchas verdades acerca de la expiación de Cristo, así que es difícil, si no imposible, encontrar una sola “teoría” que enteramente compendia o explica la riqueza de esta doctrina. En cambio, lo que descubrimos al estudiar las Escrituras es un cuadro rico y multifacético de la expiación al presentar la Biblia muchas verdades interrelacionadas concerniente la redención que Cristo ha logrado. Otro factor contribuyente a las muchas y diferentes teorías de la expiación es que mucho de lo que podamos aprender acerca de la expiación necesita ser entendido desde la experiencia y la perspectiva del pueblo de Dios bajo el sistema expiatorio del Pacto Antiguo. Ya que el tener un punto de vista correcto de la expiación de Cristo es una clave para comprender mucho de la Biblia, aun un estudio breve de las diferentes teorías de la expiación puede ser beneficioso.

La expiación de Cristo, su propósito y lo que ésta logró es tan rico que volúmenes han sido escritos acerca de ella, y este artículo proveerá simplemente una perspectiva breve de muchas de las teorías que han sido propuestas en un tiempo u otro. Al considerar los diferentes puntos de vista de la expiación, no deberíamos perder de la vista el hecho de que cualquier perspectiva que no reconozca la pecaminosidad del hombre y el aspecto de la sustitución en la expiación, lo menos que se pueda decir de ello es que sea deficiente, y lo peor, que sea herético.

La Paga de Un Rescate a Satanás: Esta perspectiva considera la expiación de Cristo como un rescate pagado a Satanás para comprar la liberación del hombre de su esclavitud a Satanás. Ésta está basada en la creencia de que la condición espiritual del hombre está cautiva a Satanás, y que el significado de la muerte de Cristo era para obtener la victoria de Dios sobre Satanás. Esta teoría tiene poco, si es que hay algo, de apoyo bíblico y ha tenido pocos partidarios a través de la historia de la Iglesia. Es herética en que piensa en Satanás, en vez de Dios, como aquel que exigió que un pago fuese hecho por el pecado y así ignora completamente las demandas de la justicia de Dios como las que vemos a través de toda la Escritura. También tiene un concepto de Satanás más alto de lo debido y lo ve como uno con más poder de lo que realmente posee. No hay apoyo bíblico para la idea de que los pecadores debieran algo a Satanás, pero a través de toda la Escritura vemos que Dios es Aquel que exige un pago para el pecado.

La Teoría de la Recapitulación: Este punto de vista considera la expiación de Cristo como algo que invierte el camino de la humanidad de la desobediencia a la obediencia. Éste cree que la vida de Cristo recapituló todas las fases de la vida humana y al hacerlo, invirtió el camino de la desobediencia iniciado por Adán. Este punto de vista no puede ser apoyado bíblicamente.

La Teoría Dramática: Este punto de vista considera la expiación de Cristo logrando la victoria en un conflicto divino entre el bien y el mal y ganando la libertad del hombre de su esclavitud a Satanás. El significado de la muerte de Cristo era garantizar la victoria de Dios sobre Satanás y proveer una manera para redimir al mundo de la esclavitud del mal.

La Teoría Mística: Este punto de vista considera la expiación de Cristo como un triunfo sobre Su propia naturaleza pecaminosa a través del poder del Espíritu Santo. Los que sostienen este punto de vista creen que el conocimiento de esto influirá místicamente al hombre y despertará su “conciencia de dios”. Ellos creen también que la condición espiritual del hombre no es el resultado del pecado sino simplemente la carencia de esta “conciencia de dios”. Claramente esta es una de las más heréticas de todas estas teorías porque para creer esto, uno tiene que creer que Cristo tuvo una naturaleza pecaminosa, mientras la Escritura es clara que Jesús era el Dios-hombre perfecto, sin pecado en todo aspecto de Su naturaleza (Hebreos 4:15).

La Teoría del Ejemplo: Este punto de vista ve la expiación de Cristo proveyendo simplemente un ejemplo de fe y obediencia para inspirar al hombre a ser obediente a Dios. Los que aceptan este punto de vista creen que el hombre está vivo espiritualmente y que la vida de Cristo y la expiación eran simplemente un ejemplo de la verdadera fe y obediencia y deben servir como una inspiración al hombre para llevar una vida similar de fe y obediencia. Ésta y la teoría de la influencia moral son similares en que ambas niegan que la justicia de Dios realmente exija un pago por el pecado y que la muerte de Cristo en la cruz sea tal pago. La diferencia principal entre la teoría de la influencia moral y la teoría del ejemplo es que la teoría de la influencia moral dice que la muerte de Cristo nos enseña cuánto nos ama Dios y la teoría del ejemplo dice que la muerte de Cristo nos enseña cómo vivir. Por supuesto es absolutamente verdad, Cristo es un ejemplo que deberíamos seguir, aun en Su muerte, pero la teoría del ejemplo falla en su reconocimiento de la verdadera condición espiritual del hombre - muerto en sus delitos y pecados (Efesios 2:1) - y que la justicia de Dios exige un pago por el pecado, algo que el hombre no es capaz de cumplir.

La Teoría de la Influencia Moral: Este punto de vista considera la expiación de Cristo una demostración del amor de Dios, la cual hace que el corazón del hombre se suavice y se arrepienta. Los que aceptan esta teoría creen que el hombre está espiritualmente enfermo y en necesidad de ayuda, y que el hombre es inducido a aceptar el perdón de Dios al ver el amor de Dios para con el hombre. Ellos creen que el propósito y el significado de la expiación de Cristo eran para demostrar el amor de Dios para con el hombre. Aunque es cierto que la expiación de Cristo es el ejemplo supremo del amor de Dios, esta teoría es herética también porque niega la verdadera condición espiritual del hombre y niega que Dios realmente exija un pago por el pecado. Esta perspectiva de la expiación de Cristo deja a la humanidad sin un verdadero sacrificio o un pago por el pecado.

La Teoría Comercial: Esta teoría ve la expiación de Cristo como algo que trae infinito honor a Dios. Esto resultó en Dios dando a Cristo una recompensa, la cual Él Mismo no necesitó, y que Cristo pasó esta recompensa al hombre. Los que sostienen esta posición creen que la condición espiritual del hombre es la de deshonrar a Dios y por lo tanto la muerte de Cristo, la cual trajo infinito honor a Dios, puede ser aplicada a los pecadores para salvación. Esta teoría, como muchas de las otras, niega el verdadero estado espiritual de pecadores no regenerados y su necesidad de una naturaleza completamente nueva, disponible sólo en Cristo (2 Corintios 5:17).

La Teoría Gubernamental: Este punto de vista considera la expiación de Cristo una demostración de la gran estima de Dios para Su ley y Su actitud hacia el pecado. Es a través de la muerte de Cristo que Dios tiene una razón para perdonar los pecados de aquellos que se arrepienten y que aceptan la muerte de Cristo como sustituto. Los que mantienen esta posición creen que el significado de la muerte de Cristo era para ser un sustituto para la pena del pecado. Porque Cristo pagó la pena del pecado, es posible que Dios perdone legalmente a aquellos que aceptan a Cristo como su sustituto. Este punto de vista falla por no enseñar que Cristo realmente pagó la pena de los pecados correspondientes a la gente, pero sin embargo que Su sufrimiento simplemente mostró a la humanidad que las leyes de Dios fueron quebrantadas y que alguna pena fue pagada.

La Teoría de La Sustitución Penal: Este punto de vista considera la expiación de Cristo un sacrificio vicario, como sustituto, que satisfizo las demandas de la justicia de Dios sobre el pecado. Al hacerlo, Cristo pagó la pena del pecado del hombre trayendo perdón, imputando justicia, y reconciliando al hombre con Dios. Los que toman esta posición creen que todo aspecto del hombre, su mente, voluntad y emociones han sido corrompidas por el pecado y que el hombre es totalmente depravado y espiritualmente muerto. Este punto de vista sostiene que a través del arrepentimiento, el hombre puede aceptar la sustitución de Cristo como pago del pecado. Esta teoría de la expiación se alinea con más precisión a la Escritura en su concepto del pecado, la naturaleza del hombre, y los resultados de la muerte de Cristo en la cruz.

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miércoles, 1 de junio de 2016

ILUSTRACIONES SOBRE LA ACEPTACION

ILUSTRACIONES SOBRE LA ACEPTACION
Gn 7:19 Y las aguas prevalecieron mucho en extremo sobre la tierra; y todos los montes altos que había debajo de todos los cielos, fueron cubiertos. Gn 7:20 Quince codos en alto prevalecieron las aguas; y fueron cubiertos los montes. Gn 7:21 Y murió toda carne que se mueve sobre la tierra, así de aves como de ganados, y de bestias, y de todo reptil que anda arrastrando sobre la tierra, y todo hombre: Gn 7:22 Todo lo que tenía aliento de espíritu de vida en sus narices, de todo lo que había en la tierra, murió. Gn 7:23 Así fué destruída toda sustancia que vivía sobre la faz de la tierra, desde el hombre hasta la bestia, y los reptiles, y las aves del cielo; y fueron raídos de la tierra; y quedó solamente Noé, y lo que con él estaba en el arca